La Comisión Europea presentó sus objetivos climáticos el pasado 6 de febrero. Según la Red de Acción Climática, podría mantener un objetivo de -90% de emisiones de gases de efecto invernadero para 2040.
Caroline François-Marsal es responsable de asuntos europeos en la Red de Acción Climática (RAC) de Francia.
La Comisión Europea presentó el martes 6 de febrero una nueva propuesta para un objetivo climático. ¿Por qué es importante en este momento?
aroline François-Marsal – La Comisión Europea dictó su objetivo para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) a nivel europeo para 2040. Había adoptado [en 2021], durante la Ley climática europea, un objetivo de reducción de emisiones de GEI del -55% para 2030. Ahora repetirá el ejercicio para 2040.
Esta es una fecha límite realmente importante, este objetivo determinará todas las leyes climáticas y ambientales que seguirán. A nivel europeo, pero también a nivel de cada país de la Unión, ya que estas leyes se aplicarán posteriormente en el Derecho nacional. Es por eso que este es el momento en que la Unión Europea establece su ruta climática para los próximos quince años.
¿Qué valor tiene la propuesta de metas?
Solo es una declaración, sin valor legislativo. Se acompaña de un estudio de impacto en el que se analizan varios escenarios posibles en función del objetivo elegido por la Comisión Europea. Hay muchos pasos en los próximos meses, o incluso años, para llegar a la adopción de esta propuesta.
El siguiente paso será la discusión de este objetivo a nivel del Consejo Europeo, en junio, que reúne a los jefes de Estado y de Gobierno de los veintisiete países de la Unión Europea. Sobre todo, serán ellos quienes elegirán el objetivo. Podrán asumir lo que ha propuesto la Comisión Europea, o proponer algo menos ambicioso, e incluso más ambicioso.
En función de lo debatido, la nueva Comisión Europea (ya que mientras tanto, las elecciones europeas habrán renovado su mandato) pondrá en su programa un proyecto de ley para el objetivo 2040. Después de eso, se tomará entre un año y un año y medio, antes de llegar a una ley adoptada por el Parlamento Europeo y el Consejo Europeo. Creo que tenemos que contar con 2025, pero dependerá mucho del panorama político del próximo mandato.
¿Qué objetivo podemos esperar para esta primera fase de negociaciones entre la Comisión y los Estados?
Según la primera información filtrada, la Comisión Europea debería establecer un objetivo de -90% de emisiones de GEI para 2040, en comparación con los niveles de 1990.
Es una buena señal que la Comisión Europea haya elegido la opción más ambiciosa entre las tres que estaban sobre la mesa (-80%; entre -85% y -90%; o entre -90% y -95%). Por otro lado, no es un objetivo alineado con el Acuerdo de París y con una trayectoria de +1,5 ° C.
«Apostaría por la captura y almacenamiento de carbono. Es una gran línea roja»
Como Red de acción Climática (que representa a 200 asociaciones), estamos presionando por un objetivo del -92% de las emisiones brutas, donde la Comisión Europea habla en neto. Esta es una diferencia fundamental en la comunicación.
¿Cuál es esta diferencia?
La cifra de la Comisión Europea se expresa en emisiones netas, lo que significa que incluye nuestras reducciones reales de emisiones de GEI, pero también las absorciones de CO2. Tanto por tierra como por bosques-por tanto por naturaleza — y tanto por tecnologías, las llamadas técnicas de almacenamiento y captura de CO2, por ejemplo.
Este es un gran punto de vigilancia para nosotros. No debemos poner demasiado énfasis en la absorción de CO2 por parte de la naturaleza, porque las capacidades de absorción de los bosques y la tierra se han reducido a la mitad en los últimos diez años. Tampoco debemos apostar por la eliminación del carbono mediante la tecnología, porque es una solución que debe dirigirse a unas pocas industrias que no podrán prescindir de los combustibles fósiles. No se puede implementar a gran escala.
En primer lugar, porque esta tecnología consume mucha energía. En segundo lugar, porque es una tecnología de captura de emisiones en origen, por lo que no tiene como objetivo la reducción de emisiones. Alimentamos el sistema de combustibles fósiles al no presionar a los fabricantes para que reduzcan su uso. Además, existen riesgos asociados con el transporte y almacenamiento de carbono. En Francia, por ejemplo, están pensando almacenar CO2 en el Mar del Norte. Sería muy intensivo en energía.
Según la información filtrada, la Comisión Europea apostaría por la captura y almacenamiento de carbono, ¡planeando multiplicar por cinco su despliegue en comparación con la tasa actual, hasta 2040! Esta es una gran línea roja para nosotros. Estamos pidiendo un objetivo bruto, que refleje solo nuestros esfuerzos para reducir las emisiones. Esto debe ser una prioridad en las políticas climáticas.
También exigen que la política climática de la Unión Europea se debata cada cinco años.…
Sí, se le pide a la Comisión Europea que establezca un objetivo climático para 2035, para garantizar que los esfuerzos se realicen lo más rápido posible y no posponga la reducción de emisiones. La idea es tener los objetivos lo más cercanos posible, para poder actuar lo más rápido posible.
La Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) también ha pedido a los Estados que establezcan un objetivo para 2035. La Comisión Europea está a favor, esto podría aparecer en su propuesta del 6 de febrero.
Sobre todo, la Unión Europea no debe retroceder, debe continuar estableciendo objetivos ambiciosos sobre el clima. Debemos ver este objetivo a mediano y largo plazo como una oportunidad para planificar adecuadamente nuestras transformaciones. Cuanto más nos preparemos, menos enfrentaremos las consecuencias del calentamiento global con toda su fuerza.
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